miércoles, 3 de junio de 2015

Pérdida.

Imagínate Valiente.
Imagínate naufragando en el aroma de su café de las siete, en la espuma de su cerveza de las seis, o en el sabor de sus lágrimas de las doce y media.
Imagínate a la deriva perdido en el mar de sus ojos, en el revés de su sonrisa, en el parpadear de su mirada, o en el girar de sus caderas. 
Imagínate riendo desesperado por encontrarte en cualquiera de sus formas, en el volver de su pelo, en el sesear de sus susurros.
Imagínate, si eres capaz, conservando tu cordura sin perderte en su locura. 
Imagínate, valiente.